¿Sabías que el petróleo, que los autos, camiones o aviones usan para funcionar sus motores, también se encuentra a más de un milla bajo tierra? ¡Exacto! El petróleo se encuentra en campos petrolíferos, lugares específicos donde el petróleo se acumula bajo la tierra. Usamos grandes máquinas llamadas taladro para extraer el petróleo del suelo. Son instrumentos masivos que nos permiten obtener el petróleo. Pocas cosas en la industria del petróleo y el gas son tan cautivadoras o emocionantes como ver un bombeo de elevación artificial funcionando, así que echamos un vistazo detrás de escena a estas increíbles máquinas que nos ayudan a llegar a nuestra fuente de combustible favorita.
El primero es mostrarles a los estudiantes cómo es un equipamiento de perforación petrolera realmente se ve: una máquina gigantesca que perfora profundamente en la tierra y extrae el oro líquido. Esto es importante porque el petróleo, al que apunta el proceso de perforación, es un recurso crítico y abastece gran parte de lo que usamos día a día. Básicamente, para que esta plataforma opere, requiere motores que quemen combustible y conviertan tanta energía como sea posible en electricidad. Esta es la electricidad que se utilizará para alimentar la plataforma, lo que le permite hacer todo su trabajo. Es lo que opera la perforadora, que excava profundamente en el suelo, las bombas que empujan el petróleo hacia la superficie y las computadoras que gestionan todo mientras se mantiene seguro.
Tienen varios elementos grandes que se combinan para que la plataforma logre extraer petróleo del subsuelo. Un componente importante de la perforadora se conoce como broca. La broca es la parte puntiaguda que atraviesa la roca para crear un agujero donde puede encontrarse petróleo. Está diseñada para enfrentar los materiales más duros, como rocas y suelos. También se utilizan tuberías para ayudar a traer el petróleo hacia arriba, una vez que lo encuentran, para que se pueda realizar el transporte por pipa. Mientras tanto, las bombas y válvulas controlan el movimiento del petróleo desde el subsuelo hasta los tanques cercanos. Cada pieza tiene su papel que desempeñar y deben estar en perfecta armonía.
Las plataformas de perforación en campos petroleros se utilizan para extraer petróleo rápidamente y competente mediante una variedad de técnicas que también incluyen aparatos distintivos para una ejecución segura. Utilizan brocas especiales para poder cortar a través de las rocas duras, ya que llegar al petróleo es bastante un desafío. Los sensores, que se usan para monitorear la calidad del petróleo y también determinar cuánto realmente se trae a la superficie. Los sensores proporcionan datos cruciales para que los operadores puedan observar todo el proceso desde que sale hasta que regresa a las computadoras. Las plataformas también emplean programas de software propios para asegurar que todos los elementos de la operación de perforación funcionen como deberían. Esto ayuda a eliminar errores y asegura que el proceso sea eficiente.
La seguridad y la eficiencia son dos de los principales requisitos para las perforadoras de plataformas petroleras. Los operadores son conscientes de la seguridad y emplean un proceso conocido como perforación direccional. Al hacer esto, pueden perforar en un ángulo que les ayuda de la mejor manera a localizar y extraer el petróleo. Sin embargo, hay bastantes aspectos de seguridad desarrollados para asegurar que no ocurran accidentes (como brotes). Si la presión aumenta demasiado, literalmente expulsa el petróleo en un brote. En todo momento, los especialistas en seguridad están allí para asegurar que todo se realice de forma segura y que los trabajadores estén protegidos.
Las personas que trabajan en las plataformas de perforación de campos petrolíferos pasan por varias miles de horas perdidas en el tiempo y condiciones de trabajo pesadas a diario. Trabajan en mal clima, como lluvia o vientos fuertes, y en terrenos irregulares que pueden complicar su tarea. La perforación puede ser peligrosa si se realiza incorrectamente, pero los trabajadores son competentes y capacitados para manejarla. Trabajan duro y lo hacen de manera tan segura y eficiente como sea posible en una industria donde las lesiones graves en el trabajo son ocurrencias diarias. No es un trabajo para cualquiera, pero los hombres que lo hacen se cuidan entre sí y se ayudan mutuamente.